Códigos éticos
Un código de ética profesional puede ser concebido como un reconocimiento colectivo de la responsabilidad de los profesionales individuales. Cuando se especifica en una forma clara y concisa, un código puede ser un factor decisivo en la creación de un ambiente en el cual la conducta ética sea la norma. "Un código deontológico debe ser una declaración concisa de reglas generales para la conducta profesional, preferentemente de naturaleza positiva". En cualquier caso, no se debe perder de vista que la exigencia ética que fundamenta los códigos deontológicos y demás instrumentos autorregulativos es la responsabilidad.
La principal función de un código es servir de guía o advertencia para la conducta en situaciones específicas. Un código debe ser diseñado fundamentalmente para inspirar, dar coraje y apoyar a los profesionales éticos, pero también para servir de base para proceder contra los que actúan mal. En contraposición con los códigos legales, los deontológicos no deben sólo prohibir conductas, sino que deben tener un énfasis positivo, apostando por modelos deseables de conducta profesional. En este sentido, podemos distinguir en todos los códigos dos tipos fundamentales de normas: normas de prohibición y normas de orientación. Ambas deben conjugarse para formar un documento, que a la vez que marque claramente la línea de lo permitido y no permitido en el ejercicio de la profesión, señale a las más altas de las cimas de la excelencia profesional.
Existen códigos y normas éticas para el uso de las tecnologías de información y comunicación, especialmente los computadores, los cuales dependen de la organización, empresa o institución. Las asociaciones de profesionales de informática y algunas empresas relacionadas con la informática han desarrollado códigos de conducta profesional (ACM9, IEEE10, BCS11, IFIP12). Estos códigos tienen distintas funciones:
- El usuario de los recursos computacionales o de comunicación tiene la responsabilidad de usarlos de manera ética, profesional y con apego a la ley.
- Las normas éticas para una profesión exigen al profesional no solo la responsabilidad sobre los aspectos técnicos del producto, sino también de las consecuencias económicas, sociológicas y culturales del mismo.
- La velocidad del desarrollo de las tecnologías de la información hace que los códigos o normas éticas sirvan de ayuda a los cuerpos legislativos, administrativos y judiciales; como un instrumento flexible o como suplemento a las medidas legales y políticas que en general se aprueban en un período de tiempo muy largo y en desfase con el avance de las TICs.
- Las normas éticas sirven para hacer al usuario consciente de los problemas y estimula un debate para designar responsabilidades.
- Estas normas tienen una función sociológica ya que dan una identidad a los informáticos como grupo que piensa de una determinada manera; es símbolo de sus estatus profesional y parte de su definición como profesionales.
- Estas normas sirven también como fuente de evaluación pública de una profesión y son una llamada a la responsabilidad que permiten que la sociedad sepa qué pasa en esa profesión; aumenta la reputación del profesional y la confianza del público.
- Estas normas permiten armonizar legislaciones o criterios divergentes existentes (o ausentes, en su caso) en los países individuales.
Varias sociedades y organizaciones profesionales nacionales e internacionales han elaborado documentos de códigos de ética para brindar pautas básicas de comportamiento a los profesionales y usuarios de la informática. Incluyen:
- Asociación para Maquinaria de Computación: Código de ética y conducta profesional de ACM.
- Sociedad Australiana de Informática: Código de ética de ACS: Código de conducta profesional de ACS.
- Sociedad Británica de Computación: Código de conducta de BCS, Código de buenas prácticas (retirado en mayo de 2011).
- Instituto de Ética Informática: Diez mandamientos de la ética informática.
- IEEE: Código de ética de IEEE, Código de conducta de IEEE.
- Liga de administradores de sistemas profesionales: El Código de Ética de los Administradores del Sistema